Las cálidas temperaturas del invierno de este año podrían ser las responsables
El Aedes aegypti llegó a la ciudad de Buenos Aires un mes antes de lo acostumbrado.
A finales de julio y principios de agosto, en pleno invierno, se detectó la presencia del mosquito que transmite el dengue en varios puntos de la capital. Así lo informó el Grupo de Estudio del Mosquito (GEM) de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires al diario La Nación. El equipo monitorea 200 sensores distribuidos en la ciudad.
El medio de comunicación informa que ejemplares adultos del Aedes aegypti fueron hallados en tres puntos de la capital cercanos a la Facultad de Agronomía, el cementerio de la Chacarita y la plaza Monseñor D’Andrea (al 2800 de la avenida Córdoba), incluyendo viviendas próximas.
En 2016, el mosquito adulto apareció en primavera, como es usual. Su pronta llegada este año responde, probablemente, a que el invierno que está por terminar registró la temperatura media más alta en Buenos Aires según el Servicio Meteorológico Nacional: 13,6°C, superando los 13,3°C de la temporada de 1997. Esto permitió que las larvas salieran antes de la primavera de los huevos que las hembras pusieron en los criaderos (algo que hacen durante los meses de frío) y que maduraran semanas antes de lo usual. Un mosquito adulto debería aparecer apenas en octubre, según el GEM.
Pero con la pronta llegada del vector del dengue, llegan también las alertas. Tal y como recoge La Nación, el más reciente Boletín de Vigilancia Epidemiológica del Ministerio de Salud de la Nación registró casos autóctonos e importados de dengue en el país hace seis semanas, después de un mes sin tener alguno.
El Aedes aegypti transmite los virus del dengue, el zika, la chikungunya y la fiebre amarilla. En temporadas cálidas, su presencia puede cubrir el 65% de la superficie de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, según la evidencia conseguida por investigadores de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales (Fceyn) de la Universidad de Buenos Aires (UBA), que monitoreó entre 1998 y 2014 unas 218 ovitrampas distribuidas en las 15 comunas porteñas.
Estrategia de prevención
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) promueve, por segundo año consecutivo, la Semana de Acción Contra los Mosquitos y la Argentina será uno de los países en participar este año, aunque aún no ha sido anunciada la fecha en la que se implementará la estrategia (cada país decide en qué fecha realizarla).
Este año, la acción estará centrada en “aumentar el nivel de conocimiento y trabajo conjunto en la comunidad, sobre la relación entre los mosquitos y las enfermedades transmitidas por ellos, como dengue, chikungunya, zika o la fiebre amarilla, entre otros”.
La OPS concentrará el mensaje de la campaña en el “control de los vectores”, formando al personal de salud que trabaja en los servicios de salud pública y privados y que trabajan directamente en la atención al paciente de las enfermedades antes mencionadas.
Para el Ministerio de Salud de la Nación la principal medida preventiva sigue siendo la eliminación y el control de los criaderos del Aedes aegypti: evitar que el mosquito se reproduzca, eliminando y limpiando los elementos que acumulen agua en cualquier sitio.
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